- ¿Si?
- ¿Elisabeth Black? - dijo una voz desconocida.
- Sí. ¿Quién es?
- Soy Zayn. ¿Está Niall contigo?
- Sí. Sube y hablamos, fuera hace frío.
- Está bien. Está aquí el pizzero. ¿Os subo las pizzas?
- Sí por favor. - respondió la chica con amabilidad.
Elisabeth se dirigió a la puerta para abrir al chico. Se apoyó en el marco y espero a que subiese. La puerta del ascensor se abrió y Zayn apareció con dos cajas de cartón y una pequeña sonrisa.
- Hola. - dijo ella con timidez.
- Hola Beth. He tenido que tocar a todos los pisos porque no sabía cual era el tuyo. Hasta que una señora del tercero me ha dicho que era este.
Elisabeth soltó una pequeña carcajada mientras dejaba paso a Zayn. Entró y cerró la puerta tras ella.
- ¿Zayn? ¿Qué haces aquí? - preguntó el irlandés asombrado mientras dejaba la revista en la que la banda era protagonista sobre la mesa.
- ¿Has pensado tomar pastillas para la memoria? Habíamos quedado para comer.
Los ojos del chico rubio se abrieron como platos. Se llevó la mano a la cabeza y miró a su amigo con expresión avergonzada.
- Zayn, quédate a comer con nosotros. - se ofreció la chica viendo la situación.
Sus dos acompañantes dirigieron la mirada hacia ella, quien inmediatamente se sonrojó.
- No quiero ser molestia. - dijo el chico moreno.
- No eres molestia. De verdad, quédate.
Niall escuchaba la conversación en silencio.
- Está bien.
Elisabeth se dirigió a la cocina satisfecha, sacó otro plato, otro vaso y las bebidas. Oía a los dos chicos hablando en el salón.
- Siento haberme olvidado.
- En realidad, Zayn, ha sido culpa mía.Yo le he distraído. - interrumpió la chica.
- Tranquila, no estoy enfadado. Pero Niall me tiene que recompensar.
- Esta bien. - dijo éste entre risas.
Una vez sentados, el nuevo invitado se dispuso a hacer una ronda de preguntas a la chica rubia.
- Elisabeth, ¿dónde estudias? - preguntó Zayn cogiendo una porción de pizza.
- En Buckswood School. - respondió ella tras darle un pequeño mordisco a su trozo.
- ¿Qué edad tienes? - siguió el mismo con su interrogatorio.
- Dieciséis.
Niall tosió un poco asombrado. Gesto que hizo reír a sus acompañantes.
- ¿Vives sola?
- No, mi compañera es una chica que va a la misma clase que yo.
- ¿Naciste aquí?
- No.
-¿De dónde eres entonces?
- De España.
Zayn dirigió la mirada hacia Niall que comía en silencio. Ambos se sonrieron.
- Pero no tienes acento español.
- Es que yo siempre he vivido aquí, mis padres me tuvieron en España hasta los dos años, después se vinieron aquí a vivir, pero hace unos años, decidieron volver y me dejaron quedarme aquí estudiando.
- ¿Tienes hermanos?
- Sí. Tengo un hermano pequeño.
- ¿Soltera?
Aquella pregunta hizo que la entrevistada y el irlandés se atragantasen al mismo tiempo. El invitado no pudo reprimir las carcajadas. Elisabeth, sonrojada miró a Niall que estaba igual que ella.
- Sí. Soltera.
- Está bien. Ya he terminado. - dijo satisfecho.
- Vaya Zayn, te habrás quedado a gusto. - dijo esta vez el chico rubio.
- Mucho. - sonrió.
La chica se levanto y empezó a coger platos mientras dejaba que hablasen con tranquilidad. Se dirigió a la cocina y comenzó a lavar los platos en silencio.
- Eh, ¿Te ayudamos?
Elisabeth se sobresaltó dejando que el plato mojado y lleno de jabón resbalase de sus manos para más tarde caer al suelo.
- Mierda. - dijo en un tono perfectamente audible.
- Lo siento Beth. Nos sentíamos mal dejándote aquí lavando los platos.
- No os preocupéis, es que soy muy asustadiza.
Mientras se secaba las manos con el trapo pudo oír sonar un teléfono móvil.
- Ahora vengo. - dijo Zayn mirando la pantalla del móvil con una sonrisa.
Elisabeth se agachó y comenzó a recoger los trozos de porcelana esparcidos por el charco de agua y jabón que había en el suelo. Pudo notar como Niall se agachaba a su lado y la ayudaba a limpiar. Se sentía incómoda teniéndolo tan cerca. El chico rubio apoyó la mano en el suelo.
- ¡Ah! Me he cortado... - dijo mirándose la palma de la mano que tenía un trozo de plato incrustado.
Ella dirigió la mirada hacia la herida y soltó un grito ahogado al ver aquello.
- Creo que tengo un botiquín en el baño. Espera aquí.
Elisabeth salió de la cocina saltando el charco con cuidado, apenas tardó un minuto en volver. Miró la herida preocupada, no dejaba de sangrar y el trozo de porcelana seguía incrustado. No tenía más de medio centímetro pero parecía doloroso. Dirigió la mirada hacia los profundos ojos azules del herido que sonreía levemente.
- ¿Cómo vais con el...? ¿Qué te ha pasado? - preguntó Zayn al ver la mano del chico.
- He puesto la mano en el suelo y me he clavado un trozo de plato.
- Niall, que poco cuidado tienes.
- Es culpa mía. Soy muy torpe. No se me debería haber caído el plato... - dijo un poco avergonzada.
- No Beth. Además que no hace falta que os preocupéis, estoy bien. Sólo tengo que sacarme este rozo de la mano y listo.
- Niall, ¿Cómo vas a tocar así la guitarra mañana en el concierto? - preguntó Zayn.
- Para mañana estaré bien.
Elisabeth cogió un algodón y empezó a limpiar la sangre.
- Te voy a sacar esto. Una, dos...
- ¡Ah! Se supone que se cuenta hasta tres. - dijo quejándose.
- Yo cuento hasta dos. - dijo ella con una sonrisa burlona mientras tiraba el trozo de plato a la basura. - No tengo vendas...
Zayn, que había recogido el resto de los trozos y en ese momento se encontraba fregando el charco de agua del suelo, miró hacia la chica.
- Creo que no hay farmacias por aquí cerca. ¿Se lo puedes pedir a alguna vecina? - preguntó.
- Está bien. - miró el reloj. - No tardo.
Elisabeth salió con rapidez del piso cerrando la puerta tras de sí.
- ¿Es ella la que sale en la revista del salón?
- Eso creo.
- ¿La llevabas de la mano?
- Estábamos huyendo de una masa de chicas.
- Pero a ti...
El sonido de unas llaves entrando en la cerradura y abriendo la puerta hicieron que Zayn no terminase la frase. Se oyeron unos pasos que se acercaban a la cocina.
- ¡Beth! ¡Ya he llegado! - gritó una chica mientras caminaba por el pasillo.
Segundos mas tarde asomó por la cocina Helen, quien al ver las personas que había en su cocina no tuvo otra reacción que gritar con toda la fuerza que sus pulmones le permitieron.
Los chicos se llevaron las manos a los oídos intentando que aquel grito que había inundado todo el bloque de pisos dejara de retumbar en sus cabezas. Niall hizo una mueca de dolor y apartó rápidamente la mano de su oído.
- Vosotros... Vo-vosotros sois... - tartamudeó.
- Zayn Malik y Niall Horan. - respondió el primer nombrado levantando la mano a modo de saludo.
- ¿Qué hacéis en mi cocina? Y ¿dónde está Beth?
- Aquí. - dijo su compañera pasando por su lado con un rollo de venda en la mano.
Helen la siguió con la mirada, suspiró profundamente y reflexionó en voz alta.
- Haber; Niall te va a enseñar a tocar la guitarra para la función de Navidad ¿verdad?
- Verdad. - respondió él.
- Y Zayn está aquí porque le he invitado a comer. - terminó de explicar la española.
- Ajá. Y ¿Qué ha pasado? - preguntó de nuevo la compañera de piso.
- Se ha cortado. - respondió el chico moreno con una sonrisa.
- ¿Y tú? ¿Qué haces aquí tan pronto? - preguntó Elisabeth una vez terminado de vendarle la mano al irlandés.
- Luego te contaré. Ahora voy a ir a hacer la compra y así no os interrumpo.
- Yo ya me iba. - dijo Zayn dirigiendose a Elisabeth para darle un beso en la mejilla y un abrazo a Niall como despedida. Le dedicó una sonrisa a Helen y se marchó.
Sigienteeeee!! ;D
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